domingo, 13 de enero de 2008

CONSEJOS VARIOS

Aquí os damos una pequeña orientación del equipaje que tenemos que preparar cada uno:

Ropa:
Calcetines de algodón y sin costuras.
Ropa interior.
Camisetas.
Pantalones (largo, chándal, etc.)
Toalla.
Gorra.
Jersey.
Chubasquero.
Esterilla, saco de dormir, útiles de aseo, linterna, bastón (que no es un adorno, pues sirve para caminos escarpados, para mantener el ritmo y para ahuyentar a los perros).
Calzado adecuado y sandalias para la ducha.
Cantimplora.
Pequeño cazo para beber y cubiertos.
Credencial del peregrino.
Cámara de fotos.
Toalla que no abulte mucho. También es recomendable una bayeta (seca mucho y no ocupa espacio).
Bolsas de plástico (pero que no hagan ruido pues molesta cuando todos duermen en el albergue) para guardar ropas sucias.

CONSEJOS
Si llevas jabón líquido (gel) puede usarse para el aseo personal y para lavar la ropa.
Llevar imperdibles para colgar la ropa en la mochila para secarla mientras se camina.
Si tienes un sueño ligero es conveniente que lleves unos tapones de oídos que aliviarán la serenata de ronquidos que se organiza en los albergues.
No estaría mal llevar un rollo de papel higiénico: en los refugios se acaban o se mojan y, desde luego, en los bosques no hay.
Salvo excepciones, las almohadas de los refugios están muy sucias: una funda de almohada no pesa y evita el contacto con ellos.
No añadir nada “por si acaso…”. A lo largo de la ruta se puede comprar todo lo necesario.
Vamos “de peregrinos”, un poco a la aventura. Dormiremos en albergues y pabellones que ya tenemos reservados. Al ser una época en la que no hay mucho jaleo de peregrinos, no hemos tenido problemas para reservar. No os preocupéis que no nos va a faltar de nada.
El camino es duro. Daos cuenta que lo vamos a realizar en una época en donde el frío y el agua son elementos que van a estar ahí un día sí y otro también. Por eso es un reto para cualquiera de nosotros. Nos ayudará a vivir después con más coherencia. El camino es austero. Tenlo en cuenta a la hora de programar el dinero para tus gastos personales.
La mochila nunca debe pesar más de 10 kg. Mochila y calzado deben ser probados antes de iniciar la aventura. Las ampollas de los pies, los roces de las correas de la mochila y los dolores de espaldas provocan la mayoría de los abandonos.

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